sábado, 6 de octubre de 2012

Cruela de Vil es una santa en comparación...

El otro día seguí a alguien solo para hacerlo sufrir. Por razones que desconozco existen algunas personas que se sienten extrañamente intimidadas por mi, puede ser porque grito mucho, o porque le tienen miedo a las cabezas incendiadas, o porque soy esplendorosamente sensual (sih.... claro), el asunto es que (no es primera vez que me pasa) algunas personas me temen y huyen de mi presencia.
Esta vez me pasó algo parecido. Un crío de la U huye de mi sin razón aparente... tampoco es como que me interese mucho su vida personal, así que en general pasa inadvertido, pero el otro día una especie de maldad extrema me invadió el alma y me dieron unas ganas enormes de ver sufrir al pobre crío. Así que, cuando iba saliendo, vi que el crío iba caminando normalmente adelante mío... hasta que me vio y empezó a apurar el paso. En general habría pensado "ah ya..." y habría continuado con mi vida, pero esta vez decidí torturarlo... y perseguirlo. Y de vez en cuando miraba para atrás, y caminaba más rápido y más rápido y más rápido... hasta que bueno, cargué la bip.
Pero en fin, fue divertido.
O soy muy perseguida.
equis de